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Después de comer, cenar, comer, cenar, abrir cintas rojas y regalos preciosos, ¡de pasar unos días maravillosos en familia!, comenzamos enero con mucha energía y muchas ganas de entrar de lleno en nuevos proyectos.
La navidad en mi estudio año tras año se transforma, muchos ya lo conocéis, ya sabéis que cada año montamos un cuento nuevo, y una temática diferente. 2013 angelitos, 2014 un circo navideño, 2015, un viaje al polo norte, y 2017 un cuento de soldaditos y bailarinas. Cada año es mas difícil innovar, y reconozco que tengo que dar muchas vueltas al tema para no caer en lo obvio.
Para mi la Navidad es un momento mágico, no os voy a engañar. Lo disfruto en pequeñas dosis agridulces, pues son meses de mucho trabajo en el estudio, y ahora con el peque en casa, siento que me pierdo muchas cosas. Sin embargo son días en los que quieres desear algo y pensar que se va a cumplir, quieres dar el todo, y no arrepentirte de nada.
Por eso es genial ver como se llena el estudio de caras conocidas y caras nuevas. Me encanta ver a pequeños de diferentes edades y ver como cada uno interactua de forma diferente con el decorado. Lo que da como resultado estas fotos tan intimas a veces, y tan enérgicas otras…
Reconozco que es mucho lo que hay que pensar, hilar y preparar, me lleva meses, aunque no lo creáis. Hoy en día la fotografía, como otras muchas cosas, al ser tan inmediato, no se valora todo lo que conlleva cuando se hace desde el punto de vista profesional, por eso si tenéis un ratito, os desvelaré que hago yo para crear mis fotografías antes y después de apretar el botón de mi cámara.
Os aseguro que no es tarea fácil. Si alguno os dedicáis a la decoración o amáis hacer y combinar diferentes motivos, texturas, artes en general, sabéis que para que todo case y se convierta en un todo, a veces hay que pedir a los astros que se alineen. Los colores no son elegidos al azar, y si os digo que el vestuario y la decoración es made in luz montero, muchos que sabéis un poco de mi ajetreada vida me diréis, ¿cuando y como lo haces?… con ayuda, sin duda, mucha ayuda, paciencia y restando horas de sueño, de ocio y familia a mi vida.
Colocar luces es pura matemática, y hay que hacerlo con cabeza y con un esquema bien diseñado, si no todo se te va al traste. Pierdes la profundidad, el volumen, y lo mas importante, el gusto por seguir haciendo fotografías pictóricas.
Dotar a una imagen de color, hoy en día no es solo una cuestión de saber combinar. Aunque la puesta en escena es la base del color, como grandes editores que somos los fotógrafos, para darles nuestra chispa, buscamos nuestro color, nuestro contraste, nuestro flow, y eso nos hace únicos. Es mucho trabajo el que nos guardamos después de cada sesión, pero cuando volvéis a por vuestras fotos, lo veis, y eso se agradece.
Hago un esfuerzo extra por crear decorados únicos para cada campaña, una parte de mis beneficios, se destinan a creación de decorados nuevos que luego quemo como un Ninot, en el buen sentido de la palabra, pues ya sabéis que la exclusividad es lo que tiene.
También los ideo yo misma, y la goma eva este año ha sido mi gran aliada una vez mas. Son diferentes tallas y modelos de niño y niña, en los que se me va otra parte de mi presupuesto de navidad.
También ideo junto con mis encuadernadores, formas exclusivas de poner vuestras fotos en formatos destinados para exponer en estas fechas. Se que las fotografías de navidad son para disfrutarlas recién salidas del horno, y de ahí que todos los complementos y encuadernados que os lleváis son de exposición.
Esta es toda la carne que pongo en el asador, esfuerzo, inversión, ilusión, conocimiento…¡y mucho mas por seguir viendo la sonrisa de cada uno de vosotros salir por la puerta para año tras año volver a entrar!
