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La boda de Mila y Sebas, es una de esas bodas que parece un cuento de hadas. Todo estaba en su lugar,¡por eso fue perfecta!
Los momentos previos a la celebración, siempre son un cúmulo de emociones, en los que se recogen momentos importantes para recordar. Los nervios que te hacen sentir que el momento ya llega, es algo que nos mantiene vivos, y cuando se respiran, entonces sabemos que hay emoción, que el momento está presente, y que todas las ilusiones que habíamos puesto días atrás, están de camino.
Mila iba guapísima. La conozco desde hace tiempo, y sé que es detallista, que tiene muy buen gusto y que es meticulosa con cada cosa que hace. Por eso durante todo el día todo tenía ese toque especial que te hace sentir bien mires donde mires.
Me emocioné cuando la vi vestida de novia, su vestido era perfecto, le quedaba como si hubiera sido diseñado en exclusiva para ella. Elegido sin duda con el buen gusto que la caracteriza.
El tocado que lució durante toda el día, fue un diseño de Luz Quirós. Ésta fue la joya mas bonita que llevaba la novia. Y es que además de ser un tocado precioso, la parte emotiva tiene su belleza propia. Este tocado está hecho a partir de piezas de lo que fueron las peinetas de novia de su madre. Cada trocito de él simboliza una persona de su familia, y en conjunto una historia preciosa que me encantó escuchar cuando me la contaron.
También la esencia y la tierra de Sebas estuvo presente durante toda la boda.
En ambos gemelos llevaba un Trisquel. Un símbolo que está formado por tres brazos que forman una espiral que significa el ciclo de la vida, la evolución y el crecimiento.
Las gaitas también sonaron a la salida de la iglesia, y una vez mas Galicia estuvo en el corazón de cada uno que los que allí estábamos presentes.
¡Hasta el coche de novios fue made in Sebas!, por eso el protagonismo del coche en algunas de sus fotos, estuvo asegurado.
Imaginación no les falta, eso os lo puedo asegurar, y tampoco ilusión. No dejaron de sonreír en ningún momento. Me gustan las parejas así.
El broche final, fue la Queimada, una sorpresa muy esperada que gusto a todos que abrió el baile de una forma muy especial.
Como ya os he adelantado, la boda de Mila y Sebas, estaba preparada al detalle, y todo salió como se esperaba, ¡maravilloso!
Os deseo muchos años felices el uno junto al otro 😉
